Seguramente han escuchado el concepto de “hustle” cuando se habla de founders que han tenido éxito. Si alguna vez han tratado de explicar qué significa “hustle”, seguramente les ha costado porque no hay una traducción exacta al español. “Hustle” es mucho más que trabajar duro y esforzarse, es una combinación de agilidad, proactividad, inteligencia estratégica, entusiasmo y perseverancia que va mucho más allá.
Adoptar una filosofía de “hustle” es muy beneficioso para founders de startups porque es lo que lleva a lograr hacer movimientos significativos usando recursos mínimos y tácticas creativas para sortear los obstáculos que se presenten en el camino.
Pero, ¿el hustle se puede aprender?
Por supuesto que hay personas cuya personalidad y experiencia de vida los lleva a tener una disposición más natural hacia ser “hustlers”, pero definitivamente es una habilidad o cualidad que se puede desarrollar. Exploremos algunas ideas de cómo podemos hacerlo.
¿Cómo pasar de trabajar duro a “hustle” para lograr resultados?
Enfocate en tu intensidad de ejecución: Tener ideas, insights y la visión de tu startup es esencial, pero no es suficiente. Es vital aplicar esos insights prácticamente con una urgencia palpable. Shaan Puri, reconocido emprendedor que vendió 3 startups (una de ellas a Twitch), dice: “La mayoría de la gente podría llegar a ejecutar a un 10, los fundadores tenemos que llegar a nivel 12.”
No lo hagás mañana, hacelo hoy: Llamá de una vez, no lo pongás en tu lista de pendientes. Si la puerta principal está cerrada, buscá una puerta lateral. ¿Esa también está cerrada? Encontrá una ventana o buscá cómo entrar al sótano. La clave es la persistencia contínua en encontrar una manera de hacer que las cosas funcionen.
Henk Rogers viajó a la Unión Soviética durante la Guerra Fría aunque le dijeron que estaba arriesgando su vida para lograr que Tetris existiera. No pongan en riesgo sus vidas, pero eleven su ejecución a 12.
Financiate como podás hasta que podás financiarte como querés: Muchos emprendedores detienen la ejecución hasta lograr conseguir fondos de inversionistas, pero eso no demuestra “hustle”. Joe Gebbia y Brian Chesky de AirBnB vendieron cereales alusivos a la campaña electoral de Obama en el 2008 para pagar las tarjetas de crédito que estaban usando para construir la startup. De no ser porque vendieron $20,000 en cereal para resolver el problema AirBnB podría no existir.
Desarrollá una red de contactos de valor: Muchos fundadores creen que todo se trata de la tecnología o del producto, pero en realidad, las conexiones correctas pueden abrir puertas inesperadas. Es importante ser muy cuidadosos en construir relaciones “ganar-ganar” para realmente crear una estructura de apoyo. El «hustle» aquí no es solo trabajar en tu producto, sino vender tu visión personalmente a quienes podían ayudarles a hacerlo realidad.
Cementá una filosofía de curiosidad y adaptabilidad: Las startups exitosas no le huyen a pivotar su propuesta de valor o adaptar su modelo de negocio. Stewart Butterfield, fundador de Slack, inicialmente estaba trabajando en un juego en línea llamado ‘Glitch’ que no despegaba. El equipo se dió cuenta que la herramienta de comunicación interna que había construido rápidamente para trabajar en el proyecto era su verdadero producto estrella. Esa capacidad para adaptarse y reconocer una oportunidad fuera de su visión original es un gran ejemplo de «hustle».
No temás el rechazo: Uno de los aspectos más desafiantes de ser fundador de una startup es enfrentar el rechazo y seguir adelante. Howard Schultz, el responsable del mega éxito de Starbucks, fue rechazado por 217 de los 242 inversionistas a los que se acercó para implementar su concepto de cafeterías al estilo italiano. En lugar de ver eso como un rechazo, lo vió como un problema que debía ser resuelto para completar su visión. Esa determinación y manejo del rechazo son parte del “hustle” que llevó a Starbucks a convertirse en lo que es hoy.
Implementar estas ideas para desarrollar la cualidad de “hustle” implica adoptar un cambio de mentalidad. Estas son cosas que no te enseñaron en el colegio ni la universidad pero definitivamente se pueden aprender.
En esencia, el “hustle” no es simplemente un término de moda, ni tampoco un llamado a trabajar tanto que descuidas tu salud, sino que es un enfoque mental, humano y táctico para sobrellevar el camino incierto de fundar una startup. Esta filosofía busca que no solo trabajés de forma más eficiente y efectiva, sino que también te desarrollés de manera profesional y personal.
“It’s not about money or connections. It’s the willingness to outwork and outlearn everyone when it comes to your business.”
– Mark Cuban, emprendedor e inversionista