Durante los últimos años como empresario y líder de iniciativas sociales, Amadeo Quirós Martén ha desarrollado una mayor sensibilidad y un deseo de lucha por dar mayor igualdad de oportunidades. Entendió que no es justa la brecha que se ha generado en términos de inequidad, sobre todo de posibilidades, pero quería aportar desde varios ángulos y aquí es donde empezó esa necesidad de hacer más y reestructurar su impacto.
Caricaco inició con la visión de su Presidente, Amadeo Quirós Martén, de buscar cómo crear un espacio para apoyar a los emprendedores bajo el modelo de incubadora. Luego, decidió dar un paso más y creó la fundación, la que busca generar más y mejores oportunidades a través de la educación, empleabilidad y proyectos de impacto social.
Carïcaco no es un nombre usual para una compañía y la pregunta más frecuente es: ¿Qué es Carïcaco? ¿Y por qué ese nombre? De niño, a Amadeo le encantaba jugar en la arena y el mar (¿a cuál niño no?). Se fascinaba con inventar carreras de caricacos (los ‘cangrejitos’ que viven en conchas) y si estaba en un barco, inventaba nuevas competencias entre delfines, peces y tiburones. Era un mundo imaginario que le hacía especial gracia a su abuelita, Floria Herrero Pinto, quien como buena artista dedicó un poema a su nieto:
«Capitán Carïcaco»
“El capitán Caricaco subió de categoría, ya no es capitán cangrejo, ahora es capitán de barco. Hace apuestas en su lancha a ver cuál corre más rápido, si el delfín aventurero o los peces atuneros. Es valiente y atrevido, no le tiene miedo a nada, ni a los fieros tiburones, ni al pico del pez espada. Siempre está lleno de amigos para jugar escondido, para correr en la arena y apresar a la ballena.”
En un momento que lo necesitaba, esta narración encontró un lugar especial en su mente y corazón e inspiró fuerza para ‘subir de categoría’, ser capitán de su propio barco y motivar a otros a serlo también.